lunes, 25 de agosto de 2014

CERRANDO CÍRCULOS.

Hace mucho que no escribo en este blog. Ahora que estoy concentrada en mi vida como escritora. Sé que pronto mi primera novela va a ser editada, y sé que va a ser un éxito por las personas que ya la han leído y son de mi confianza.
Atrás han quedado los días del teatro con sus alegrías y sinsabores. Cuando no eres aceptada en un mundo y luchas- más por cabezonería que por razones- por hacer algo con lo que has soñado de niña, el tortazo es fijo.
Si a eso se une un sentimiento no correspondido; a pesar de las señales que indicaban lo contrario; te vuelves más testaruda todavía.
Ahora volverán los cursos de teatro; algunos impartidos por el grupo de teatro que tanto me encanta y uno de ellos de Clown. No es que sirva de mucho ser payasa; o tal vez sí: para reírte de ti misma y del mundo, y levantarte cada día con una sonrisa y la espada de la Felicidad dispuesta a enfrentar cada nueva jornada.
Pero los recuerdos del pasado quedan ahí.



Por supuesto que este curso y hacer teatro para adultos; que es lo único que me dejaron hacer; cerraría círculos y me haría conocer gente nueva tras varios años sin pisar la Escuela Navarra de Teatro. Pero lo más importante es ver a las personas que me hirieron de otra forma:  ni importantes, ni no importantes; sólo personas que ya no me influyen.
En el tiempo pasado desde que intenté volver a hacer teatro he crecido bastante espiritualmente; y como la cita que me encanta tanto: "Cuando Dios te niega algo que deseas mucho, es porque te reserva algo mucho mejor". Y lo aplico también al amor.



No sé si volveré a los cursos de teatro. No me arrepiento de ayudar a la ENT cuando lo precisó; pero he vuelto al camino de la niña de ocho años que escribía para que esconderse de la realidad y sus cuadernos le servían para tener a raya a los gamberros que se metían con ella; aunque fuese por un día.
Soy escritora y algo clown de nacimiento.




Mariangeles García-Jimeno.

jueves, 28 de febrero de 2013

Renovados sueños y un hasta pronto.

Hoy he ido a la escuela de nuevo para ver "Delirios de papel" de La Llave Maestra por no sé cuál vez.

Me encanta esta obra y el grupo se disgrega porque Álvaro Morales y su mujer, Edurne Rankin se van a Chile, país de origen de Álvaro. El resto se queda aquí con nuevos proyectos y nuevas funciones que no pienso perderme.
he podido ver a Fermín, un amigo de cuando intenté estar como estudiante en la escuela que ya presenta un trabajo como director teatral. Aunque él esta nervioso y lo he visto inseguro, es una cita que no debo perderme.
Volver a la escuela me ha renovado el sentimiento de amor y locura por el teatro que tuve a los 44 años y que no se ha minado con los obstáculos.
Será que esta etapa zen que vivo me hace ver las cosas de una forma más pacífica, que no dar razón al cien por cien a quien no explicó bien lo que tenía que decir.
Que la verdad podría dolerme, lo acepto. Pero es siempre mejor a una mentira piadosa. Sin embargo, dejemos este tema en el pasado que es donde está.
Esperando la hora me he metido en la iglesia que hay en San Agustín. Había un funeral, pero he ido a un rincón donde había velas que poner para San Judas Tadeo, santo de los imposibles y he encendido seis- en realidad bombillas-; pidiendo por mí y mis cosas de este mundo y de temas sentimentales; y por la Escuela Navarra de Teatro para que salga de la maldición en la que está metida porque no es afín a los políticos que nos gobiernan. Aunque siempre he dicho que tienes que ser muy diplomático con la mano que te da de comer.
Me he sentido pues había un ambiente muy bueno de aquellos que en el pasado vi como enemigos.

El tiempo puede no curar las heridas, pero hace que las cicatrices no duelan.
Ahora a seguir con mis sueños de tener un escenario para mí, aunque sea como actriz aficionada; y como no, con mis novelas.
Y a mi Llave Maestra ¡mucha mierda!
Hacer reír y disfrutar a la gente es algo que no todo el mundo sabe hacer. Es un don de Dios que ellos dan al mundo.

Marian García.

sábado, 16 de febrero de 2013

Salud, Bienestar y Felicidad.

http://irdecomprashoy.com/marian1965 

En estos tiempos de crisis me he metido en esto de vender cosas por Internet. No sé si esto me va a producir mucho beneficio, lo que sí sé es que aunque pudiera haber elegido cosas más comerciales, decidí que fuese un sitio de salud, bienestar y autoayuda.
Y eso no quita que sea un lugar donde libros de romance, música o instrumentos musicales tuviesen cabida.
Todo lo que nos trae bienestar mental, psíquico y espiritual vale para sentirnos felices.
Un lugar donde me siento bien apuntando todo lo que me encanta de las artes, y aunque no hay sitio para las artes escénicas a no ser por vídeos de películas; sigue siendo algo que me parece correcto escribir aquí.
Y hablando de las Artes Escénicas, no es que lo haya dejado; pero la escuela sé que jamás fue mi sitio y ahora que hay otra escuela, espero crearme una cultura escénica sin dejar de vivir mi otra pasión: los libros.
Además, hay que buscar un trabajo que no tiene porqué impedir que seamos actriz y escritora.
Ahora, con el tiempo, veo que puse muchas expectativas en la gente que un día conocí en la escuela y es nuestro ser el que debe dirigir nuestra vida, no dejarnos dirigir por lo que los demás quieren de nosotros.
Nunca debes dejar de soñar y luchar por tus sueños.
Marian García.

jueves, 1 de noviembre de 2012

CUANDO EL "VENENO" SE TE METE EN EL CUERPO.


Hace tiempo que no escribo. Pero eso no significa que el "veneno" del teatro se haya ido de mí.
Ya no es mi sitio la Escuela Navarra de Teatro, pero eso no significa que no haya otras escuelas donde encontrar mi sitio; porque el teatro tiene sitio para todo el mundo. Su universalidad es incuestionable en todas las edades y culturas.
Aunque el trabajo es apretado y este año no ha podido ser, la escuela BUTACA 78 es una nueva opción para mi vida artística, así como el volver a intentar aprender a tocar la guitarra.
Como dijo un amigo de mi padre, si no tengo nada especial en mis manos puedo aprender a tocar la guitarra como cualquiera y con la habilidad que tengo de ir componiendo canciones mientras voy por la calle, aunque casi nunca me acuerdo después de lo que canto. Pero sabiendo música puedo poner música a mis poemas, casi todos de amor.
Cuando el "veneno" del arte se te mete en el cuerpo nada puedes hacer; debes seguir tus impulsos si no quieres ser un infeliz en tu vida.

Marian García.

miércoles, 15 de agosto de 2012

Volver a luchar por mis sueños.

Parece que debo ser masoquista. He decidido volver a la escuela y luchar por mis sueños, vivir el teatro. Con razón dicen que cuando te subes a un escenario te envuelve y te conviertes en teatro adicta. Es una droga que es maravillosa tener.
Con un espíritu muy positivo y dispuesta a aprovechar el curso de teatro a tope, a apuntarme en el curso de Iniciación de las Artes Escénicas para Adultos por tercera vez, y esta vez voy a terminar el curso y subirme por segunda vez al escenario. Y para aprovechar el año,  además, apuntarme a bailar tanto danza árabe como flamenco y lo que haga falta mientras mi dinero y mi tiempo me lo permita.
Nací con ganas de ser actriz y voy a conseguirlo.
Además; seguir con mi novela de misterio "Luna Roja" y mis poemas de amor y de otros temas.

He aquí el último que salió mientras cantaba la letra de forma espontánea esperando que fuese la hora para comenzar a trabajar; para no perder la letra la escribí y pensaba al tiempo que se la dedicaría a mis amigos de La Llave Maestra:

Teatreros, faranduleros,
cómicos, juglares
del nuevo tiempo.
Somos teatreros, marioneteros,
cuentacuentos, nómadas
por voluntad propia;
amantes  de los caminos,
los pueblos y el aplauso.
Somos teatreros, faranduleros,
cuentacuentos, juglares
de la nueva era.
No nos importa mucho
si mañana el alimento
en nuestras bocas
tendremos.
Vivimos de este hoy,
de  este escenario,
nómadas por voluntad propia.
Nosotros... los teatreros.

(Barañain, 14 de agosto de 2012).

Marian García.

sábado, 4 de agosto de 2012

Nueva situación, nuevas oportunidades...

Ha pasado tiempo desde que escribí por última vez. Hablaba de la libertad de expresión pues alguien quiso acallar que yo opinase sobre ciertas cosas. Y eso que esa misma persona se daba cuenta de que era mi blog, y que yo sepa nunca he hablado con insultos ni nombres propios. No en esa entrada que eliminé pues lo prometí, aunque no debí hacerlo pues eso es someterte a quienes no tienen derecho sobre ti.
Ahora quiero escribir sobre los nuevos tiempos que vienen a la ENT con un sistema de enseñanza reestructurado. Aunque pueda parecer malo, a saber si es bueno este nuevo sistema. Por ahora a disfrutar de los cursos de verano.
Mi última información es que, tal vez, se haga un curso partido en trimestres diferenciados lo que me recuerda al sistema universitario con sus créditos por asignatura, en vez de todo un ciclo formativo desde septiembre hasta mayo o junio.
Lo ideal sería la normalización, pero los recortes nos afectan a todos y además debes caer en gracia. Parece que lo último la escuela lo tiene mal con el Gobierno Foral de Navarra.
Sólo deseo que amiguitas que desean ver cumplidos sus sueños de ser actrices y adultos que buscan adentrarse en el arte escénico como yo en mí día consigan tener sus clases.
Y si los que ven fantasmas donde no los hay, mi amor por la puerta roja de San Agustín es incuestionable; pero hay que saber hacer bien las cosas cuando dependes de ayudas. En estos tiempos es una cuestión de quién juega mejor sus cartas; y el Gobierno siempre tiene cursos acelerados de Póker.

Marian García.

viernes, 18 de mayo de 2012

EL TEATRO Y LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN.

Acabo de ver en el teatro una magnífica obra en la que la estética y la denominación de teatro alternativo es clarísima.
Me ha resultado una continuación de otra obra de los mismos autores y directores, la pareja formada por Edurne Rankin y Álvaro Morales, y aunque estoy más acostumbrada a otro tipo de teatro, me quito el sombrero ante tanta imaginación.
Pero quiero hablar de lo que me ha recordado la obra, la esencia del teatro y de cualquier arte: la libertad de expresión.
Es algo muy importante en todas las épocas. El tema de la libertad de expresión, incluso en los tiempos de la censura- tal vez ahí es donde más imaginación se ha vertido en el teatro, el cine y otras artes-, para allí seguir disfrutando de la libertad de expresión. Sin este derecho de la humanidad, las artes no podrían ser abanderadas de las protestas del pueblo sobre la sociedad en la que vivimos.
Si amo el teatro es por algo tan puro como la libertad de contar las cosas que el pueblo pide en su momento histórico adecuado. Sólo hay que estudiar la historia del teatro y la literatura para saber en qué época se han  escrito grandes obras y por qué se escribieron según los momentos históricos que la sociedad vivía.

Marian García.